CONTROVERSIA EN VALLADOLID
Los genocidios fueron y lamentablemente siguen siendo una constante en este universo.
El continente Europeo, o mejor dicho, quienes gobernaban ese espacio en aras de una supuesta civilización, arrasaron con todo más allá de sus fronteras, pueblos originarios incluidos.
Asia, América y África, sufrieron tales masacres. Aun después de los principios revolucionarios de libertad, igualdad y fraternidad, Francia no tuvo empacho en la matanza despiadada de Argelia con su Legión extranjera
Vivimos en la actualidad una violencia irracional sin fin y los más diversos actos de terrorismo siempre se pregonan en nombre de Dios y la defensa de las religiones.
Mucho se ha hablado y escrito sobre la conquista de América, de la criminal cristianización de los habitantes naturales de esa tierras y de los ultrajes, robos y torturas de todo tipo y siempre con la complicidad de las máximas estructuras eclesiásticas.
Aunque en la actualidad el 12 de octubre se recuerda como el “Día de la diversidad cultural” en lugar del anterior “Día de la raza”, la batalla simbólica continua. El Teatro La Máscara, imprescindible y reconocido espacio de nuestra cultura, le abrió las puertas y el escenario a esta ya memorable obra teatral CONTROVERSIA EN VALLADOLID que, sin duda alguna, pasará a engrosar lo mejor de la riquísima historia de nuestro teatro independiente por su texto, actuación y dirección y que llega además en un momento muy difícil para todo el movimiento cultural y teatral.
La fundamental importancia de la obra reside en revelar pues las contradicciones al interior de la estructura de la corona española del siglo XVI. Allí se desnudan las ambiciones políticas, el imperialismo español y lo más deleznable de los seres humanos en el ámbito del poder, todo en pos de riqueza para la corona.
La autora del texto, María Inés Sardi nos transporta a esa nefasta época de la historia. La corona española, tambaleante a posteriori de la inquisición, enfrentada a otros colonialismos, expande sus dominios. Su fuerza militar demoledora contra pueblos débiles, destruyendo todo vestigio originario, económico y como dice la autora “borrar su cultura y asesinarlos o torturarlos”.
Nadie sale indemne al final de la obra. El altísimo nivel que en ella se expone nos despierta de cierta pasividad que se da en las mayorías populares. Nos deja perplejos por tanta monstruosidad que se desarrolla a lo largo de ella. El despojo, la aniquilación, la hambruna y todo tipo de saqueo que hoy en día se impone a través de planes económicos en reemplazo de las armas de guerra.
Muestra teatral extraordinaria y difícil con actuaciones memorables de: Leonor Soria en el rol de Juan Giménez de Sepulveda, María Elena Sardi como Fray Bartolomé de las Casas y Beatriz Apas como Domingo de Sopo. Papeles masculinos encarnados por mujeres, con una magnífica dirección, tiempos justos y conmovedores momentos dramáticos que el texto impone. La obra muestra la feroz controversia entre el repudiable y cavernario Giménez de Sepúlveda y Fray Bartolomé de las Casas en su dolorosa mea culpa, quien también fue al principio cómplice de la atroz y criminal barbarie en México.
Nunca más oportuna su llegada cuando aquí y en el mundo, posverdad mediante, se está generando un negacionismo a las horribles hecatombes que ha debido soportar la humanidad por los poderosos, oprobiosos y demoledores poderes económicos, políticos y militares.
JAIME TARASOW AM TRADICION 1580
Teatro La Mascara Abril 2017
El continente Europeo, o mejor dicho, quienes gobernaban ese espacio en aras de una supuesta civilización, arrasaron con todo más allá de sus fronteras, pueblos originarios incluidos.
Asia, América y África, sufrieron tales masacres. Aun después de los principios revolucionarios de libertad, igualdad y fraternidad, Francia no tuvo empacho en la matanza despiadada de Argelia con su Legión extranjera
Vivimos en la actualidad una violencia irracional sin fin y los más diversos actos de terrorismo siempre se pregonan en nombre de Dios y la defensa de las religiones.
Mucho se ha hablado y escrito sobre la conquista de América, de la criminal cristianización de los habitantes naturales de esa tierras y de los ultrajes, robos y torturas de todo tipo y siempre con la complicidad de las máximas estructuras eclesiásticas.
Aunque en la actualidad el 12 de octubre se recuerda como el “Día de la diversidad cultural” en lugar del anterior “Día de la raza”, la batalla simbólica continua. El Teatro La Máscara, imprescindible y reconocido espacio de nuestra cultura, le abrió las puertas y el escenario a esta ya memorable obra teatral CONTROVERSIA EN VALLADOLID que, sin duda alguna, pasará a engrosar lo mejor de la riquísima historia de nuestro teatro independiente por su texto, actuación y dirección y que llega además en un momento muy difícil para todo el movimiento cultural y teatral.
La fundamental importancia de la obra reside en revelar pues las contradicciones al interior de la estructura de la corona española del siglo XVI. Allí se desnudan las ambiciones políticas, el imperialismo español y lo más deleznable de los seres humanos en el ámbito del poder, todo en pos de riqueza para la corona.
La autora del texto, María Inés Sardi nos transporta a esa nefasta época de la historia. La corona española, tambaleante a posteriori de la inquisición, enfrentada a otros colonialismos, expande sus dominios. Su fuerza militar demoledora contra pueblos débiles, destruyendo todo vestigio originario, económico y como dice la autora “borrar su cultura y asesinarlos o torturarlos”.
Nadie sale indemne al final de la obra. El altísimo nivel que en ella se expone nos despierta de cierta pasividad que se da en las mayorías populares. Nos deja perplejos por tanta monstruosidad que se desarrolla a lo largo de ella. El despojo, la aniquilación, la hambruna y todo tipo de saqueo que hoy en día se impone a través de planes económicos en reemplazo de las armas de guerra.
Muestra teatral extraordinaria y difícil con actuaciones memorables de: Leonor Soria en el rol de Juan Giménez de Sepulveda, María Elena Sardi como Fray Bartolomé de las Casas y Beatriz Apas como Domingo de Sopo. Papeles masculinos encarnados por mujeres, con una magnífica dirección, tiempos justos y conmovedores momentos dramáticos que el texto impone. La obra muestra la feroz controversia entre el repudiable y cavernario Giménez de Sepúlveda y Fray Bartolomé de las Casas en su dolorosa mea culpa, quien también fue al principio cómplice de la atroz y criminal barbarie en México.
Nunca más oportuna su llegada cuando aquí y en el mundo, posverdad mediante, se está generando un negacionismo a las horribles hecatombes que ha debido soportar la humanidad por los poderosos, oprobiosos y demoledores poderes económicos, políticos y militares.
JAIME TARASOW AM TRADICION 1580
Teatro La Mascara Abril 2017
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