EL MAL DE LA PIEDRA

La memoria es el idioma de los sentimientos, el pasado nunca pasa y no se puede renunciar a él. Pero asimismo la memoria también nos ayuda, si hay una concientización e interés en ella de sectores involucrados, de no volver a cometer los mismos horrores que la historia de la humanidad cometió, sigue, y seguramente seguirá cometiendo.
EL MAL DE LA PIEDRA, ésta enorme maravilla teatral nos retrotrae a la España de la guerra civil, del cruento enfrentamiento entre hermanos y que ya, pasados 80 años, la sangre de ésta fratricida locura aun no se ha secado, generando aun disputas y entrecruzamientos con el neo nazismo, resistente a desaparecer, y las organizaciones populares democráticas.
La profunda e indagadora dramaturgia de Blanca Domenech, talentosamente elaborada, sumamente política, nos adentra en la España de hoy, y su dilema respecto a la atroz y aberrante dictadura Franquista y la negación y la intolerancia que aun subsiste en sus clases sociales.
La cruenta contienda que había comenzado en 1936, finalizó en 1939, tras la derrota republicana. El sangriento dictador manda a construir un faraónico monumento para honrar a los caídos y glorificar los del lado vencedor. Pero esa construcción está hoy en peligro, y es contratada una restauradora para diagnosticar su inminente o no, derrumbe de esa construcción realizada en una montaña. La imposibilidad se salir del lugar de trabajo por movimientos callejeros enfrentados, la obliga a convivir con un guardia enrolado o con una concepción de neutralidad respecto a los conflictos ideológicos políticos, con esta trabajadora acérrima anti franquista. Esta circunstancial convivencia genera jugosos y críticos diálogos donde salen a relucir enormes contradicciones en su concepción política -ideológica en ella y verdades a medias, pero también de atender en los conceptos de él. Hay una indagadora mirada al pasado con visión de presente.
¿Qué hacer con el Valle de los Caídos donde hay aproximadamente 34000 cuerpos de ambos bandos, que fueron enterrados como una forma de reconciliación? Pero reconciliación y perdón son, si se quiere, sinónimos de impunidad. Aun con innumerables falencias, la justicia demostró el horror del terrorismo de estado y de las atroces dictaduras tan proclives y ligadas a sectores sociales y económicos dominantes, dispuestos a generar genocidas, en defensa de sus espurios intereses.
Ahora bien, el perdón se puede dar a quien o quienes en el supuesto, reconocen su culpabilidad. ¿ En la España destrozada en su integridad por esa dictadura se dio tal reconocimiento? Y por otro lado; ¿se puede convivir con la barbarie aun inserta en la sociedad ?
El Mal de la Piedra trata mucho de ello, y de las enormes contradicciones que tenemos los seres humanos que hace que muchas veces claudicamos ideales ideológicos, a costa de nuestra supervivencia.
Cuánta similitud con la banalización que en el mundo se están dando de distintos genocidios todavía frescos, y con nuestros dolorosos 30.000 desaparecidos, y con los hijos robados y cambiados de identidad.
Cuán importante cobra en estos momentos lo expresado por el luchador uruguayo Raúl Sendic, ”LAS PALABRAS NOS SEPARAN, LAS ACCIONES NOS UNEN”.
Las actuaciones de Romina Pinto como la de Iván Steinhardt han entrado ya a la galería de actuaciones maestras de nuestro teatro. Todo lo que podemos decir y trasmitir sobre su desempeño en el espacio escénico no alcanzaría a concretarlo con palabras, sólo la retina podrá disfrutar y admirar las admirables composiciones artísticas.
La dirección de Tony Lestingi brilla con mucha luz. Logró manejar a éstas dos fieras actorales, que se sacan chispas en el espacio escénico y logró dotar a una obra dura y profunda, donde los razonamientos son perfectamente complementados, con una agilidad que realzan el espectáculo.
Que la memoria nos siga acompañando, pero mas que nada nos señale el camino para un mundo mejor.

JAIME TARASOW-AMTRADICION 1580

TEATRO EL EXTRANJERO-SABADOS 16.30.

JUNIO -JULIO 2019

Ficha técnico artística
Autoría:
Blanca Doménech
Actúan:
Romi Pinto, Iván Steinhardt
Escenografía:
EDUARDO MURO ASESOR ESCENOTECNICO
Iluminación:
EDUARDO MURO ASESOR ESCENOTECNICO
Diseño de vestuario:
EDUARDO MURO ASESOR ESCENOTECNICO
Diseño De Sonido:
Iván Steinhardt
Edición de sonido:
Iván Steinhardt
Edición de video:
Kike Palombo, Iván Steinhardt
Música original:
Enrique Pareta
Diseño gráfico:
Romi Pinto
Asistencia de dirección:
Emilio Zinerón
Prensa:
Carolina Alfonso
Producción:
El Vacío Fértil Compañía Teatral
Dirección:
Tony Lestingi

Comentarios

  1. Gracias Jaime has comprendido a esta hermosa y corajuda autora y lo que intentamos contar, comunicar con este gran equipo de artistas gracias@

    ResponderBorrar
  2. Agradecido por el elogio, las criticas son tambien muy dificiles por las distintas interpretaciones que se pueden dar debido a la vision de quien la realiza. En este caso sobre una obra sumamente indagadora respecto a la desgracia española y un analisis sobre las reacciones humanas sobre hechos trascedentales

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

EL EQUILIBRISTA

"DORA, un ingrediente especial"

EL HOMBRE DE ACERO