PETIT HOTEL CHERNOBYL

Una sumamente interesante puesta teatral es PETIT HOTEL CHERNOBYL, la cuál además de insertarnos dentro de una temática de las relaciones humanas, hay una crítica subliminal a una sociedad enferma y despiadada, en la que cada vez más, pronunciadamente los mortales pierden espacio, como si los poderosos sectores económicos dominantes, se los quisieran sacar de encima.

La dramaturgia situá a cuatro mujeres que cohabitan una pieza en una especie de pensión. El mismo es un espacio pequeño y precario, la convivencia no es nada fácil, afloran infinidad de inconvenientes que esa convivencia genera.

Las cuatro arrastran tras de si enormes frustraciones y fracasos de todo tipo, las diferencias entre ellas son abismales, pero a pesar de todo se complementan y se necesitan.

También esa necesidad es frustrante, porque la relación entre ellas también es enfermiza. Se agreden, se lastiman verbalmente pero siguen adelante, esperando un mañana mejor que quizás nunca llegará.

No se sabe de donde, cómo y porque llegaron allí, por los diálogos denotamos que sus vidas son trágicas, viven de los recuerdos y ellos tampoco son como para sonreír.

Las cuatro están marginadas, no encuentran lugar en la sociedad. Viven sin vivir, como la ya veterana tenista, de los fracasos permanentes. A medida que transcurre la historia las vamos conociendo en sus anhelos, deseos y esperanzas, probablemente más de un espectador se identificará con sus desgracias.

Es una comedia bastante amarga que pinta a un sector bastante importante de nuestro universo y lo hace mediante un humor algo grotesco. Ese humor que las hace reír de sus desdichas. Un poco al estilo del humor judío, que a pesar de los padecimientos de ese pueblo a través de su historia, se ríen de sus desgracias.

Estos personajes no son únicamente nuestros, son ,diríamos, universales. Son seres sin ubicación en el tiempo que quieren, pero no pueden o no las dejan encontrar ubicación, lo que se agrava, pues la mujer aún lucha por ser reconocida con los mismos derechos que el varón.

El arte debe ser un órgano moral de la vida humana y el mismo en definitiva es o debería ser una crítica a la realidad social.

La dramaturgia a través de estos personajes se interna en la degradación a que está llegando la intolerante y despiadada sociedad, que sólo le da lugar a los ganadores.

Pero dentro de lo oscuro de sus vidas y el duro presente ansían disfrutar algo en el futuro y algo de ello es la amistad . A pesar de las enormes diferencias entre estos seres, de las diferentes infelicidades vividas, sobresale el cariño y amor y la necesidad de ayudarse y darse fuerza.

Un jugoso libro de Andrés Binetti donde se abrazan el drama y la comedia y la magnífica dirección de Nicolás Manasseri manejando a la perfección tiempos y secuencias, le permiten a las cuatro actrices muy adentradas en sus respectivos roles, una impecable actuación artística.

JAIME TARASOW.-AM 1580 TRADICION.-

TEATRO NUN.- JUAN RAMIREZ DE VELAZCO 419.-

DOMINGOS 21HORAS.-

Ficha técnico artística

Dramaturgia:

Andrés Binetti

Actúan:

Laura Manzini, Alejandra Oteiza, Fernanda Provenzano, Martina Zapico

Vestuario:

La Costurera Teatro

Escenografía:

Vanessa Giraldo

Video:

Jimena Roig

Comunicación:

Valeria Franchi

Diseño gráfico:

Nahuel Lamoglia

Asistencia:

Lucía Oxandaburo

Prensa:

Duche&zárate

Producción ejecutiva:

Nicolas Manasseri, Martina Zapico

Dirección:

Nicolas Manasseri