JUANA LA LOCA

 

El teatro es una tarea artesanal, una experiencia en vivo de comunicación entre el o los actores y el espectador, lo que allí se genera en ese instante y en ese sólo lugar es algo mágico . Lo que ese encanto logra es engendrar un impulso creador en el actor que cristaliza la propuesta artística.

JUANA LA LOCA una impresionante dramaturgia de Pepe Cibrián Campoy enfoca aspectos de la vida de Juana I de Castilla, injustamente humillada y encarcelada por casi 50 años, en los altos de un castillo sola y sin comunicación con el mundo.

La tragedia de ésta infausta mujer se desarrolla en un unipersonal donde Maria Seghini se mete en la piel, hasta transformarse ella misma en un poco de Juana. La dramaturgia trata de comprender y reivindicar a ésta importante personalidad de España.

Cibrián no trata de empoderarla ni endiosarla, sino sólo y simplemente humanizarla a quien no fue comprendida o directamente discriminada en ese tiempo.

Toda la historia de la humanidad, toda la bibliografía religiosa como la Biblia misma fueron escritos por seres del sexo masculino y la historia y todo el desarrollo social ha sido patriarcal.

Las acusaciones hacia Juana fueron una siniestra acusación del poder de los masculinos, con la traición del padre y un hijo quienes urdieron una compleja trama de confabulaciones, infundios y mentiras. La apartaron de su derecho al trono que le correspondía y la encerraron.

Esto ocurrió a la muerte de su esposo Felipe el hermoso, que a pesar de los cuernos producidos por aventuras con otras mujeres, ella lo amaba y tal tragedia y tal historia contada como tantas otras en forma caprichosa por los varones hablaba de Juana , la celosa, la exagerada, la mujer de la “supuesta” enfermedad mental. Sólo las mujeres saben del tremendo dolor, en ocasiones difícil de controlar, las trágicas muertes de un marido e hijos.

También en el texto hay una crítica a las costumbres sumamente patriarcales y el modo de vida de la colonial España de los siglos 15 y 16. Es como un viaje del pasado lleno de injusticias hacia el presente, donde aún reinan las leyes patriarcales hasta un futuro incierto, si ésta infausta justicia sigue igual.

La base en la que se asienta el sistema patriarcal es el control del varón por sobre el trabajo o los derechos de la mujer. Si hoy día tal barbaridad sigue existiendo, imaginémonos lo que sería en esos siglos, si actualmente las denuncias sin pruebas de fiscales, jueces y supuestos periodistas pueden y logran el encarcelamiento de inocentes.¿quién nos asegura que Juana no lo hubiera sido también.?

Porque escribir o difamar por distintos medios mentiras permanentemente con el tiempo se convierten en verdades.

Los intelectuales son personas que con una pequeña linterna, que es la pequeña mochila de su limitado saber, avanzan a tientas en el oscuro camino del universo haciendo humildes aportes a nuestro saber y esta obra vaya si lo es, teatralizando una historia que pareciera haber sucedido ayer por la total similitud con nuestra actual justicia .

La interpretación requería un esfuerzo actoral tremendamente difícil. Seis personajes amen de Juana debe encarar Maria Seghini, el texto está escrito en versos en el español antiguo, un enorme desafío por donde se lo mire, de la cual no solo salió airosa sino con una actuación memorable.

La iluminación a través de los claro oscuros también cumple un importante complemento en la generación de conmovedores climas.

Pero toda esta magnifica concreción artística llega a tan alto nivel por la mano sutil y sumamente creativa en la dirección de Ana Padilla, que supo manejar los tiempos y creación de movimientos actorales que fascinan y emocionan al público.

JAIME TARASOW.-AM 1580 TRADICIÓN.-

TEATRO PATIO DE ACTORES.- LERMA 568.- DOMINGOS 11.30 HS.

Ficha técnico artística

Autoría:

Pepe Cibrian Campoy

Actúan:

María Seghini

Vestuario:

Pepe Uría

Escenografía:

Pepe Uría

Iluminación:

Daniel Gismondi

Música original:

Ana Foutel

Asistencia de dirección:

Laura Assieu

Dirección:

Ana Padilla 

PRENSA:CAROLINA ALFONSO