LA CONVERSACIÓN INFINITA


Una experiencia casi inédita en el universo del teatro es la elaboración teatral
de LA CONVERSACIÓN INFINITA dramaturgia de Gustavo Pardi que se concreta sobre poemas del poeta Juano Villafañe.

No es nada fácil para un escritor gestar una dramaturgia teatral con la libertad que la literatura le permite, para elaborar y presentarnos una historia, que puede ser real o ficcional. Imaginémonos ahora si la misma se concentra sólo en una poesía y se desarrolla una historia en base a su desarrollo literario. Sin duda la dificultad es y debe ser enormemente mayor, podría decirse casi inimaginable.

Pero el maravilloso arte en general y el teatro en particular logra y permite estas cuasi insólitas fantasías y la utopía cobra realidad en éste estupendo logro artesanal artístico

El espectáculo está ubicado en un tiempo sin tiempo, en un espacio real e imaginario, sin lugar específico, donde dos seres evocan distintas instancias vividas durante su existencia en la vida terrenal.

Todo lo que pudo ser y no fue, es como si en el más allá hicieran un balance de ese tránsito por la vida, con las alegrías, frustraciones, deseos concretados y otros no logrados.

Las dificultades en la convivencia, las controversias en la relación amorosa entre ambos, donde el amor tanto sensual como sexual se interrelacionan con el deseo a concretarlos, y porque los corazones privados de amor se vuelven crueles, codiciosos y feroces.

Y algo de ello ocurre en ésa conversación, amorosa por momentos, tormentosa, sumamente áspera en otros. En la lectura de cartas y evocación a la mujer que se amó, van quedando en el recuerdo todas las conversaciones de la vida como poemas infinitos.

Todo está admirablemente interpretado como se dice, el poeta es el otro y el otro invita a una conversación. Un viaje a través de la profunda elaboración poética de Juano Villafañe.

El trabajo actoral de Gustavo Pardi es de inmensa dimensión, quien sólo tiene como apoyo escenográfico un banco, pero ese detalle le da más jerarquía a su trabajo, como en la dirección del fabuloso espectáculo.

Quienes lo acompañan en el transcurso de la obra tienen una correcta participación. Todos los detalles técnicos a la perfección.

Una aguda interrogación sobre nuestras conductas y los criticables egos que tenemos.

Este enorme desafío, felizmente concretado, donde la poesía y el teatro se abrazan como felices enamorados, generando una verdadera joyita, donde Gustavo Pardi brilla en sus distintas facetas que me hace recordar un dicho recogido por mi madre muy popular hacia mediados del siglo pasado refiriéndose a lo multifacético de algunas personas-”Yo lo escribo, yo lo hago y yo lo vendo”.


JAIME TARASOW.- AM 1580 TRADICIÓN.-

TEATRO CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACION.-

CORRIENTES 1543.-DOMINGOS 20 HS.-


 


 

 

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