LA PASIÓN SEGÚN GH

 

La estupenda y profunda dramaturgia de la obra “La pasión según G H” de Marcelo Velázquez, que logró de ésta novela de la gran escritora ucraniana-brasileña, Clarice Lispector, una adaptación teatral realmente admirable.

La temática de la novela es muy compleja, al tiempo que es una indagación muy interna de los conflictos humanos y quizás también una averiguación de la traumática novelista sobre si misma.

Es una mujer que dice no haber tenido marido ni hijos, sin problemas económicos, inserta en la clase media alta, que se llama a si misma G H, inicia un recorrido o un viaje por su amplio y confortable lugar de residencia y a medida que lo va describiendo, se adentra en los avatares del ser humano, sus contradicciones, como los de ella misma.

En esos por momentos frustrantes episodios de vida, se cuestiona no poder encontrar un lugar en la actual sociedad patriarcal y agresiva. Habiendo transitado ya parte importante de su existencia, se angustia buscando una explicación por la jactancia y el egoísmo en la conciencia humana, en la pérdida de los afectos y en la violencia infernal y despiadada de los supuestos seres racionales.

Pero consciente o inconscientemente ella también cae en actitudes de prejuicio cuando, al mismo tiempo, sufre la discriminación por su condición de mujer en el mundo de la cultura como escultora aficionada.

Durante el transitar por su suntuoso y cómodo espacio residencial nos muestra las bondades de un lugar donde podía despejarse de frustraciones, de sueños incumplidos, los halagos suntuosos de una clase pudiente. Toda la descripción es si se quiere normal, lo bello de su alojamiento enfrentado a las dudas y sombras de su vida cotidiana.

Un cambio cambio radical no peligroso se produce cuando penetra en el cuarto de”la sirvienta,” así despectivamente identificada, todo en ella se trastoca y en algo se colapsa. Esa persona de servicio doméstico acaba de renunciar al trabajo y comienza a sufrir otra soledad hasta poder ubicar una nueva reemplazante.

Esperaba encontrar el cuarto desordenado, sucio y húmedo. Grande su sorpresa al encontrar todo realmente impecable. La pobreza no es sinónimo de suciedad. El prejuicio de clase comenzaba a prevalecer.

Sólo una cucaracha salida del placard, cambio el clima y la llevó a una meditación.

Una duda puede presentarse en éste momento de la obra ¿ese insecto símbolo de la mugre, la inmundicia además portador de muchos males puede haber sido una ilusión en esa habitación absolutamente limpia y ordenada?. La historia familiar de Clarice,la autora, ella incluida, está plagada de horrores y espantosas miserias humanas sólo ocasionadas por su condición de judía. Su madre fue violada por un militar, debieron huir de su residencia en Ucrania debido a los progroms, e incendios de sus casas, permanentes persecuciones y muertes sin motivo ni razón, sólo por motivos exacerbadamente antisemitas. Los ucranianos fueron fieles aliados en la última guerra con los nazis e históricamente odiadores de los creyentes de la Tora.

Esa desconfianza y discriminación quizás inconsciente de esa mujer como la pinta Lispector y esa cucaracha a la que devora, pueden ser algo del prejuicio y la desconfianza hacia los demás, que en mucho arrastra el pueblo judío .El dilema de ella era si ciertamente era que la odiaban o era su subconsciente que lo imaginaba. La contradicción de los discriminados que a su vez son también discriminadores.

Una obra apasionante que comienza como un relato a los que la están escuchando y finaliza suplicando que la dejen finalizar y que la entiendan.

Marcelo Velázquez además de la admirable adaptación, se hizo cargo de tan difícil compromiso como la dirección de esta concreción artística y realmente cumplió plenamente con el difícil compromiso. Con un escueto decorado, sólo un tablado, lo demás es el trabajo actoral de Mercedes Fraile, quien con su capacidad fascina al espectador.

Toda la parte técnica admirable, como la filmación de la cucaracha vista a pantalla grande.

Una obra artística no sólo para ver sino mucho para meditar.


JAIME TARASOW.-AM1580 TRADICION.-

PORTON DE SANCHEZ-SABADOS 18 HS- SANCHEZ DE BUSTAMANTE 1034



Ficha técnico artísticai

Autoría:
Clarice Lispector
Adaptación:
Marcelo Velázquez
Actúan:
Mercedes Fraile
Maquillaje:
Mónica Gutiérrez
Diseño de pelucas:
Paula Molina
Diseño de vestuario:
Paula Molina
Diseño de escenografía:
Ariel Vaccaro
Realización de escenografia:
Ariel Vaccaro
Edición De Imagenes:
Christina Steel
Realización Audiovisual:
Nico Di Cocco, Victoria Di Cocco
Música original:
Matías Macri
Cámara:
Damián Lastra Quintana
Diseño De Iluminación:
Alejandro Le Roux
Fotografía:
Damián Lastra Quintana, Fernando Lendoiro
Dibujos:
Rafael Landea
Diseño gráfico:
Fernando Lendoiro
Asistencia de dirección:
Milagros Previgliano, Lucas Suryano
Asistencia De Escenas:
Milagros Previgliano, Lucas Suryano
Prensa:
Carolina Alfonso
Producción Audiovisual:
Nico Di Cocco, Victoria Di Cocco
Producción ejecutiva:
Rosalía Celentano
Dirección:
Marcelo Velázquez



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