EL GOLEM DE PRAGA

Una gratísima sorpresa y un interesante logro artístico fue la presentación de la primera opera klezmer, en la que se entrelazan, tradición, música, una nefasta historia, y el bellisimo canto operístico, con algunos momentos de bel canto. Brillantemente interpretado y sobriamente dirigido.

EL GOLEM de PRAGA, es una creación de Gastón Brian Gliksztein y Matías Linetzky, una ópera en dos actos, con las populares melodías klezmer. Trata mediante el arte, traer a la memoria una instancia especial vivida por el pueblo judío, castigado y perseguido desde su mismo nacimiento, sufriendo acusaciones increíbles que hoy día se llaman fake news.

Un hecho histórico ampliamente conocido, nos hace conocer el padecimiento que comenzó a sufrir la población judía de Praga a partir del advenimiento al poder del Emperador Rodolfo II, que instaló su corte entre 1572-1612. Para esa época comenzó a circular un rumor en referencia a la aparición de un niño cristiano muerto, acusando al pueblo de la Torá de haberlo secuestrado y matado para utilizar su sangre para sus rituales. Una infamia que las masas populares absorbieron.

Aclaremos que para esa época la instrucción no era pública, la educación era para unos pocos, la mayoría de la población analfabeta, por lo que las noticias circulaban oralmente motivando una cruenta violencia.

Ante tal circunstancia el Emperador, dejándose llevar por tales falacias, imbuído en la ideología de la inquisición española ocurrida 100 años atrás, los condenó al destierro y si no lo cumplían, a matarlos directamente.

Las permanentes persecuciones fueron obligando al pueblo judío a concentrarse en comunidades para poder desarrollarse y concretar una vida pacífica y religiosa.

En esas circunstancias dice la leyenda, el rabino de la ciudad tuvo un sueño en el que se le ordenaba la construcción de un ser artificial para defender a los amenazados. Y es así como surge el Golem de Praga.

Para la mitología hebraica es un ser animado fabricado, a partir de materia inanimada.

Cuando el rabino, considerado el más sabio de la comunidad terminó su construcción notó que el mismo no tenía habla por lo que en su frente escribió la palabra EMET, que en hebreo significa verdad.

Como todas las leyendas, las mismas circulan de generación en generación aunque las mismas no contengan valores científicos.

Esta historia es contada a través de cantos y música en vivo, donde también se muestran las vivencias cotidianas de la colectividad y no faltan algunas alusiones así como al pasar, que las mujeres tienen que estar en la cocina y no en cuestiones varoniles.

Como el Golem no tenia inteligencia, no sabía cuando debía parar de las órdenes recibidas, por lo que hubo que desactivarlo, sacándole la primera letra y quedando solo Met, (muerto), luego de cumplida su misión.

Un espectáculo muy bien ideado y sobriamente concretado, recreando una triste leyenda que a pesar de los años esos nefastos infundios no han desaparecidos. Prueba son “Los protocolos de los sabios de Sion” horroroso panfleto en época de la Rusia zarista, el trágico Holocausto y numerosos centros de secuestros y torturas a detenidos judíos durante la última dictadura militar con paredes llenas de consignas antisemitas e insignias nazis.

Un hermoso espectáculo para disfrutar y meditar sobre las consecuencias que puede provocar en la mente de los humanos la permanente difusión de noticias falsas con nefastas intenciones.


JAIME TARASOW.- AM 1580 TRADICIÓN.-

FUNDACIÓN BEETHOVEN.-NOVIEMBRE 24-2022


Ficha técnica
El Rabino Loew: Gonzalo Almada
El Golem de Praga: Diego Rochinas
Perle: Lucia Andrada
Lea: Evgenia Lisina
Iosele: Emmanuel Degracia
Alexej: Richard Manis
Shimele: Diego Soler
Dudel: Charley Rappaport
Zelda: Claudia Mazer
Guía de Turismo: Aldana Gribnicow
Pueblo Judio: Ana Emanuel/Aimará Vazquez.
Piano: Damian Henquin
Violín: Pétalo Selser
Clarinete: Federico María Mastronardi Pérez
Trompeta, teclados y dirección musical: Matías Linetzky
Dramaturgia, libro y letras: Gastón Brian Gliksztein
Música Original: Matías Linetzky
Dirección vocal y musical: Matías Linetzky
Asistencia de dirección y Stage Manager: Julieta Sorrentino
Diseño de Sonido: Matías Linetzky
Identidad gráfica: Wilfredo Parra
Redes y diseño gráfico: Magdalena Margo y Valentina Torcisi
Diseño de Luces: Gastón Brian Gliksztein y Julieta Sorrentino
Vestuario: Camila Torres Muñoz
Producción: Damián Herrera Siegel
Puesta en escena y Dirección general: Gastón Brian Gliksztein






 

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