JUAN VAIROLETTO

JUAN VAIROLETO o Bairoletto, la obra póstuma del siempre recordado Juan Carlos Gené, nos historia algunos aspectos de la vida de ese personaje, quien según en diferentes interpretaciones sean artísticas, periodísticas o literarias se lo trató como un bandido rural. Esta composición artística trata de reivindicarlo y nos hace meditar sobre aquello de que “La historia la cuentan los que ganan”.

La obra se centra en la vida de quien se convirtió en un símbolo de la justicia popular. A través de una sesión de espiritismo los protagonistas de la misma, narran los hechos previos a su suicidio que descarta luego de una intensa y seria investigación de Gené, el informe policial de que fueron las fuerzas policiales de Mendoza y La Pampa las que lo mataron, acribillándolo a balazos.

No es una historia lineal de su existencia, sino que se centra en la última noche antes de su drástica determinación de poner fin a su vida, a los 47 años, ya alejado de sus andanzas en favor de los pobres.

Hacia fines del siglo 19 y comienzos del 20, nuestro país recibió una importante inmigración quienes traían también nuevas ideologías, que estaban surgiendo en la empobrecida y violenta Europa.

Las oligarquías feudales dominaban la política y desde el gobierno los destinos del país. No existía la clase media y la vida rural era casi una esclavitud. Empresas como la Forestal devastaron las tierras y se fueron . Ese desastre forestal, territorial y humano, aun hoy día Santa Fe sufre las consecuencias. Ello es debido que gran parte de nuestra historia política y económica está viciada de nefastos negociados y ya se sabe que cuando la política entra por la puerta, la justicia se escapa por la ventana.

Esa barbarie forestal, territorial y humana no es más grave que el suypuesto bandidaje para ayudar a los pobres necesitados?. Es muy fácil hablar de derechos y justicia con la panza llena, cuando los mismos no llegan o no amparan a los desposeídos. Como puede ser que quienes evaden los impuestos con depósitos en paraísos fiscales, quienes tiraron seres vivos desde aviones a las aguas, quienes generaron la semana trágica en la segunda década del pasado siglo, quienes masacraron a indefensos peones rurales de la Patagonia rebelde, quienes nos endeudaron por cien años con créditos que nadie investigó y donde fueron a parar, quienes dicen que a los jubilados no hay que protegerlos porque igual pronto se han de morir, acaso no son mas peligrosos esos genocidas y nefastos delincuentes que la”LEY” los ampara.

Es esa nefasta doble vara que la “injusta justicia” nos sigue rigiendo y salvo algun excepciónal fallo, los ricos, generalmente no van a la cárcel.

No fue casualidad que la llanura pampeana engendrara este hijo de inmigrantes para que su figura prontamente se convirtiera en una leyenda urbana y Vairoletto comenzó a tomar relieve en las distintas comisarías que no lo podían apresar mofándose y ridiculizando a esos milicos .

Sus hazañas comenzaron a consolidarse rápidamente como la imagen de un Robin Hood pampeano o como todavía perdura “el padrecito de los pobres”.

Este solitario justiciero nunca se dio con políticos ni con ninguna ideología partidaria, con la que nunca se identificó. Fue fiel a su propia doctrina y era consciente que mientras predominara un sistema social donde unos vivan de la explotación del trabajo ajeno, la lucha de clases será inevitable y él a su manera utópicamente creyó en un mundo mas justo para todos.

En esta obra dramática se entroncan pasado y presente pues al día de hoy se lo sigue venerando como un justiciero y un santito pues le aducen milagros. A los héroes se los recuerda, pero a las leyendas nunca se las olvida y Vailoretto es eso, a pesar de ser figura discutible para otro sector de la sociedad. Solo pudo ser detenido por traición de un antiguo compinche orillando ya los 47 años cuando vivía con su mujer y dos hijas en un rancho de Villa Alvear, Mendoza, como un humilde chacarero. ¿Porque traicionan quienes lo hacen? Motivos hay muchos no siempre por dinero, en este caso fue por venganza en la disputa de una mujer.

El desarrollo de esta propuesta es tremendamente conmovedora y la magia del teatro logra una total empatía. Esa integración de actores y espectadores plasmando un espectáculo artístico con profundo contenido humano,donde subliminalmente lo deja traslucir. Como se puede respetar los derechos de los otros cuando los unos son vulnerados?. Con una puesta en escena sumamente creativa de Carlos Di Pasquo y Fernando Martín, apoyado en unas torres tubulares transparentes como único recurso escenográfico, concretan una propuesta teatral sumamente emotiva.

El trabajo actoral de esta cooperativa obrera es de un estupendo nivel que se ve realzado por la magnífica plasmación del plantel técnico.

Una concreción artística de altísimo nivel que cobra enorme importancia en el actual momento momento que vive nuestro sufrido país.-

JAIME TARASOW.- AM 1580 TRADICIÓN.-TEATRO DUMONT 4040

SANTOS DUMONT 4040.-

Ficha técnico artística

Actúan:

Luis “cuervo” Lento, Fernando Fernández, Gabriel Galindez, Luciano Guglielmino, Fernando Martín, Leandro Morcillo, Federico Navajas, Juan Gil Navarro, Juan Pablo Martínez, Federico Uzinka Queipo

Escenografía:

Carlos Di Pasquo

Diseño de vestuario:

Jorgelina Herrero Pons

Diseño sonoro:

Luciano Guglielmino

Video:

Fernando Díaz

Diseño De Iluminación:

Fernando Díaz

Fotografía:

Rubén Sotera

Diseño gráfico:

Gonzalo Barleand

Asesoramiento histórico:

Alcides Rodríguez

Asistencia Corporal:

Doris Petroni

Asistencia de dirección:

Emilio Zinerón

Producción:

Grupo S&V, Tacec Teatro Argentino De La Plata

Coach Vocal:

Sofia Domínguez

Dirección:

Carlos Di Pasquo, Fernando Martín

PRENSA:CAROLINA ALFONSO